El funcionamiento del mercado cambiario ocupa una parte central del “staff report” divulgado por el FMI, que además incluye una serie de compromisos del lado argentino. Allí se estableció que el Gobierno elaborará para junio un calendario con las “condiciones básicas” para avanzar con la liberación del mercado cambiario. Por otra parte, el FMI advierte por el nuevo aumento de la brecha cambiaria y sugiere que el atraso del dólar oficial se ubicaría en un rango “que va del 10% al 25%”.
El documento que figura el equipo económico argentino, por otra parte, reconoce implícitamente que deberán acelerar el ritmo de incremento del dólar oficial. “Para mejorar la acumulación de reservas, la tasa de devaluación deberá ubicarse de manera consistente por encima de la inflación”, y al mismo tiempo por debajo de la tasa de interés estipulada por el Central, actualmente en el 78% anual nominal, arriba del 110% real anual.
En marzo, por ejemplo, el tipo de cambio oficial aumentó a un ritmo inferior al 6%, cuando la inflación se habría ubicado en 7% o incluso más. El texto elaborado por el equipo económico sugiere que hacia adelante el ajuste cambiario deberá ser superior, lo que implicaría todo un desafío en plena época preelectoral.
“Mientras continúan los controles cambiarios para asegurar el target de reservas, estamos trabajando para efectivizar el funcionamiento del mercado, con foco en los incentivos y en reducir su complejidad”, asegura el texto. De hecho, Sergio Massa mencionó ya en redes sociales la intención de avanzar en esta dirección, aunque por ahora sin mayores precisiones. El equipo económico aclara que solicitó la asistencia técnica del Fondo para avanzar en esta dirección.
Tal como se había anunciado, el FMI aceptó flexibilizar la meta de reservas netas por los efectos que tendrá la sequía en el nivel de exportaciones. Para fin de marzo, el stock exigido bajó en USD 3.500 millones. Sin embargo, la exigencia fuerte sigue siendo la de fin de junio, ya que habrá que acumular nada menos que USD 4.900 millones.