Una muñeca inflable que regaló un empresario chileno a un ministro para “estimular la economía” desató polémica en el país, incluyendo el rechazo de la mandataria Michelle Bachelet al calificarlo de una falta de respeto hacia la mujer.
Tras una junta de la Asociación de Exportadores de Manufactura (Asexma) se entregaron premios a funcionarios y personalidades -que habitualmente tienen tono de humor-, pero el juguete sexual generó duras críticas de grupos defensores y en redes sociales sobre el uso de la imagen de la mujer.
La lucha por el respeto a la mujer ha sido un principio esencial en mis dos gobiernos. Lo ocurrido en la cena de Asexma no se puede tolerar”, dijo Bachelet en su cuenta de la red social Twitter.
