El taekwondista bosnio Kerim Ahmetspahic ha impuesto un nuevo récord Guinness tras romper 111 ladrillos con la cabeza en apenas 30 segundos.
El joven de 16 años realiza una voltereta para recobrar fuerzas y quebrar más de 20 bloques sin utilizar las manos.
El joven agradeció a sus padres y entrenador al finalizar la ceremonia que ha desatado un debate en redes sociales, pues los internautas consideran que se trata de una práctica peligrosa.