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Tartagal

Irresponsabilidad al palo: hacía picadas y trató de "negros de mierda" a policías

No es la primera vez que un joven de 19 años a bordo de un auto sale a imitar la saga cinematográfica de Rápido y Furioso.

El mismo joven que en más de una oportunidad pasó "volando" a bordo de distintos vehículos de alta gama por la ciudad de Tartagal, identificado por la Policía como Gonzalo Tomás, de 19 años, volvió a subirse a un rodado, esta vez con un amigo menor de edad, y alcoholizado se puso a correr picadas por las calles de esa ciudad. Ante la presencia policial se produjo una peligrosa persecución, el auto de los jóvenes terminó incrustado en un morro de arena que evitó cayeran a un vacío de 15 metros.

Como si la lujuria al volante no le hubiera bastado, tras impactar con el morro de arena el joven conductor se bajó del rodado y comenzó a insultar a los uniformados, de "negros de mierda" no los bajó, frases que lamentablemente parecerían haberse puesto de moda en el último tiempo en Salta.

El rodado en el que se trasladaba el joven de 19 años junto a un amigo es un Peugeot modelo RCZ, y mientras los policías realizaban patrullaje, en inmediaciones de avenida Packham y Primera Junta, vieron el auto con los amigos pasar a gran velocidad realizando peligrosas maniobras, iban en sentido Sur - Norte. Llegaron hasta la avenida Mariano Moreno y ante la voz policial de "alto" los infractores salieron a toda velocidad con sentido Oeste - Este, iniciando una persecución de película.

Una de las últimas arterias donde terminó la arriesgada aventura de los jóvenes de 19 y 17 años fue sobre la calle Cabildo, en contramano, y la calle Castelli, donde milagrosamente el Peugeot quedó atrapado en un montículo de arena al borde del río Tartagal. El vehículo podría haber seguido de largo y caer al río desde unos 15 metros de altura, aproximadamente.

"Ustedes no saben lo que hacen, no saben quién soy y quién es mi familia. Los voy a hacer echar a todos negros de mierda", vociferó enojado contra los policías el joven de 19 años. Al lugar llegó personal de tránsito, quien labró la infracción correspondiente, retuvo el auto y personal de bomberos fue comisionado para que sacaran el vehículo del lugar. Luego del test de alcoholemia el joven conductor arrojó resultado positivo con 0,67 g/l. Ambos amigos fueron trasladados a la comisaría 45 donde queda ron detenidos por amenazas a la autoridad.

Fuente: El Tribuno



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