"En algunos lugares falta el agua y en algunos sobra", dijo en 2015 el entonces presidente Mauricio Macri. Esa frase, dicha a propósito de las inundaciones en el Litoral, campeó ayer el intercambio que se produjo en la Cámara de Diputados de Salta sobre un proyecto de declaración del diputado Moisés Balderrama (del bloque Justicialista Gustavo Sáenz Conducción) para pedir que la Nación instale en el departamento Rivadavia oficinas técnicas con dispositivos de alertas tempranas de las crecidas de los ríos Bermejo y Pilcomayo.
En la práctica la iniciativa no es más que una expresión de deseos, un pedido dirigido a legisladores y legisladoras nacionales por Salta para que a su vez lo transmitan al gobierno nacional. De entre ellos, en agosto pasado la senadora nacional Nora del Valle Giménez (Unión por la Patria) presentó un pedido para que el gobierno nacional informe "cómo se implementa el sistema de alerta temprana en ambas cuencas".
Como las inundaciones son recurrentes en la zona de influencia de las cuencas de ambos ríos en el norte salteño y saber anticipadamente de las crecidas ayuda a mitigar daños, un sistema de alerta temprana es de gran utilidad. Sin embargo, en épocas en que el gobierno libertario achica el Estado (por ejemplo, está ahora mismo retirando los cajeros automáticos del Banco Nación de localidades del norte provincial), el pedido suena a expresión de deseo nada más.
Fuente: Salta 12