Jorge Restom, en sus declaraciones a la 97.7, denunció la repetida referencia a "obras faraónicas" que nunca se materializan, lo que evidencia una inacción preocupante ante una situación que exige respuestas inmediatas.
Uno de los problemas más alarmantes es la presencia de cianobacterias con toxinas en el agua acumulada, lo que está provocando trastornos severos en la salud de los habitantes. El agua presenta un olor fuerte y penetrante, lo que indica la presencia de contaminantes y la falta de tratamientos adecuados.
El legislador enfatizó que el agua potable debería ser inodora y de alta calidad para garantizar la salud de todos los ciudadanos, y que es inaceptable que la población tenga que enfrentar estos peligros en su suministro básico.
La gravedad de la situación llega al punto de que el propio Diputado ha tomado medidas preventivas por recomendación médica. Desde junio, ha dejado de consumir agua de la canilla debido a la presencia de riesgos para la salud. Esta decisión refleja la urgente necesidad de tomar acciones concretas para solucionar los problemas en el suministro de agua potable en San Martín.
Por otro lado, el legislador lamentó que la empresa Aguas del Norte no esté tomando las medidas necesarias para resolver la crisis del agua y asegurar su calidad para el consumo humano: “Aguas del Norte dice que el agua está para consumir, que la tomen ellos”. La postura de la compañía contrasta con la situación alarmante que enfrentan los habitantes de la localidad, lo que genera una creciente desconfianza y preocupación entre la población.