Vecinos y vecinas de Tartagal (cabecera del departamento San Martín) se manifestaron anoche en el centro de esa ciudad para reclamar la aceleración de las obras de los pozos que podrían proveer de agua al departamento, que continúa sin normalización en la provisión del servicio.
La protesta se concretó pese a la resolución del Ente Regulador de Servicios Públicos (ENRESP), que suspendió nuevamente desde julio la facturación para Tartagal y otras localidades del departamento San Martín: Aguaray, General Mosconi, Río Carapary Norte, Piquirenda, Yacuy, Tranquitas, Virgen de la Peña y Zanja Honda.
En el instrumento legal fechado el 14 de agosto el ENRESP indica que “ante la bajante extraordinaria del rio Caraparí que afecta a Tartagal, Mosconi y Aguaray”, los municipios “cuentan con 3.5, 4.5 y 5 horas de servicio al día de distribución de agua potable” por día. Hay un total de 17.134 usuarias y usuarios afectados. El organismo contralor solicitó a la empresa prestataria del servicio sanitario que refuerce el reparto de agua en camiones a todas las personas afectadas.
En la resolución se dispone además el levantamiento de la suspensión de facturación para Campamento Vespucio, Coronel Cornejo, General Ballivián y Salvador Mazza, dado que “no son abastecidos por el Sistema Itiyuro”, que es el que se encuentra afectado.
El miércoles último vecinos y vecinas de la Asamblea de Lucha por el Agua de Tartagal (ALPAT) se reunieron con el presidente de Aguas del Norte, Ignacio Jarsún. Según lo indicado por Víctor Soruco, uno de los integrantes de la organización vecinal, hubo un compromiso de conectar todos los pozos al sistema Itiyuro una vez que estén concluidos y operativos. Soruco afirmó que por información que dio la propia empresa, hasta el momento se han terminado solo tres de los 13 comprometidos. “Dicen que el dinero está. Pero que es un solo contratista. Entonces les dijimos que sean tres o cuatro” contratistas, contó el vecino a Salta/12, quien destacó que el verano está próximo.
Según contó el vecino, también hubo un reconocimiento de que una vez en funcionamiento, el aporte de todos los pozos comprometidos no llegará a cubrir el 20 por ciento de la producción de agua que aportaba el Itiyuro. Y es que la bajante del río Caraparí, que alimenta al sistema, “es histórica”, según lo observado desde el ENRESP y explicado desde la empresa.
Fuente: Página 12
