A un año y medio del inicio de la pandemia, la agencia Bloomberg confeccionó un ránking donde calificó a los mejores y peores países del mundo para vivir la pandemia. Allí, Argentina figura como uno de los peores, a raíz de la aparición de distintas variantes del virus, una lenta campaña de vacunación y aislamiento global. Nuestro país ocupa el puesto 53 y solo se ubica por encima de Filipinas, Malasia e India.
La campaña de vacunación más grande de la historia está permitiendo que partes del mundo deroguen los mandatos de máscaras, relajen las restricciones y desmantelen las restricciones fronterizas, haciendo que la magnitud de la reapertura sea clave para la calidad de vida. La domesticación de casos y muertes alguna vez fue primordial, además de garantizar un sistema de atención de salud sólido. Ahora, la capacidad de esencialmente retroceder el reloj y volver a los tiempos previos a la pandemia está adquiriendo una importancia aún mayor.
“Para eso, es fundamental la apertura de una economía al mundo, y es por eso que hemos introducido un nuevo elemento, Reapertura del progreso”, puntualizó la agencia internacional en su Ranking Covid de Resiliencia. Dos nuevas métricas capturan la facilidad de entrar y salir de un lugar y cuánto se han recuperado los viajes aéreos, junto con nuestras otras 10 medidas que rastrean las tasas de mortalidad hasta el recuento de infecciones, la libertad de movimiento y el crecimiento económico. Este giro ha marcado el comienzo de cambios dramáticos en las filas. Estados Unidos es ahora el número uno, con su lanzamiento de vacunas rápido y expansivo, dominado por las inyecciones de ARN Messenger altamente efectivas, que detiene lo que alguna vez fue el peor brote del mundo.