Santiago López Soto, fiscal Penal de la Unidad Fiscal contra la Narcocriminalidad (UFINAR), representó al Ministerio Público Fiscal en el juicio abreviado en el que dos mujeres, de 25 y 40 años, fueron sentenciadas por el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
Lucia Herrera fue condenada a cuatro años de prisión efectiva de cumplimiento domiciliario por ser autora del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, mientras que Erika Ayelén Garabito fue sentenciada a 2 años y 8 meses de prisión de ejecución condicional por el mismo delito, como partícipe secundaria.
Las mujeres habían sido denunciadas a través de la web del Ministerio Público Fiscal y mediante llamados anónimos realizados al Sistema de Emergencias 911.
Desde UFINAR se encomendó al personal del Cuerpo de Investigaciones Fiscales que realizara tareas de campo para confirmar o descartar las denuncias.
A través de distintas intervenciones, los investigadores del CIF confirmaron que Lucía Herrera y Ayelén Garabito realizaban actividades compatibles con la venta de estupefacientes desde su vivienda ubicada en barrio San Alfonso, por lo que desde UFINAR se solicitó al Juzgado de Garantías una orden de allanamiento.
La medida tuvo lugar el 26 de octubre de 2022. Al ingresar los oficiales, Garabito entregó de manera voluntaria sustancias estupefacientes que se encontraban en su poder, así como $86.900 en efectivo que guardaba en un placard y $15.200 que tenía en un bolso.
En la habitación de Griselda Herrera fueron halladas bolsas y recortes de polietileno, una tijera y un cuchillo con restos de sustancia y dinero en efectivo. Además, al ingresar el perro antinarcóticos, marcó una pared de la vivienda. Al revisar, los efectivos hallaron escondido en un bloque de cemento, envoltorios con una sustancia amarillenta en forma pulverulenta, que dio positivo para cocaína.