Hoy por la mañana, a más de un año del crimen frente a la disco Le Brique, el juez de Garantías David Mancinelli firmó la elevación a juicio presentada por la fiscal Verónica Zamboni en noviembre pasado para los nueve rugbiers acusados de matar a golpes en el cráneo a Fernando Báez Sosa, un hecho calificado como un homicidio doblemente agravado por alevosía y por la cantidad de participantes, cuya pena es la prisión perpetua, según confirmaron fuentes judiciales a Infobae.
Así, tras haber renunciado a un juicio por jurados populares, enfrentarán un tribunal colegiado de tres magistrados en la jurisdicción de Dolores con fecha a definir.
De los diez acusados, solo Juan Guarino queda definitivamente sobreseído, con un planteo original de la fiscal Zamboni que no lo vinculaba en el hecho. Lo mismo fue para Alejo Milanesi, liberado junto a él al comienzo de la causa. Sin embargo, Mancinelli tomó en cuenta el planteo de los abogados de la familia Báez Sosa, Fernando Burlando y Fabián Améndola, que aseguraron que había elementos para imputarlo, entre ellos, marcas compatibles con rasguños en el cuello y un reconocimiento parcial de un amigo de Fernando en una rueda. Así, Mancinelli consideró que la participación o no de Milanesi deberá ser resuelta en el juicio: el juez buscó, principalmente, no privar a los Báez Sosa del derecho a justicia. El rugbier, sin embargo, seguirá libre.