La Justicia decidió detener ayer por la tarde a la líder de la agrupación Tupac Amaru en Mendoza, Nélida Rojas.
La mujer, junto con miembros de su familia, estaba siendo investigada luego de una denuncia de febrero del año pasado cuando un grupo de personas la acusó de estafas por un plan de viviendas.
La imputación que recae sobre la mujer, el brazo mendocino de Milagro Sala , quien sigue presa en Jujuy, es por asociación ilícita, coacción agravada y estafa.
Lo que llamó la atención a las autoridades judiciales es que la dirigente se presentó voluntariamente junto a su marido en la fiscalía de Lavalle, donde residen, y expresó que no tenía ninguna intención de fugarse. Esto motivó a la Justicia a disponer la detención, ya que se habría enterado con antelación de un allanamiento que estaba previsto realizarse la semana próxima.
Además de Rojas, quedó a disposición de la Justicia, su esposo, Ramón Domingo Martínez y sus dos hijas con las que viven en Lavalle. Además, los investigadores analizan los vínculos con otros familiares y el crecimiento patrimonial que han tenido en los últimos años.