Luego del conflicto por el desalojo policial de la "escuela itinerante" en la Plaza del Congreso el domingo último, desde el entorno de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, Mauria Eugenia Vidal, señalaron que "la pelea será a fondo. La gente quiere que se cumpla la ley y que no se perjudique a los chicos, que tienen que estar en clase. La provincia multará a los sindicatos más combativos y mejorará la propuesta la semana próxima", confió a LA NACIÓN una fuente oficial.
Por otro lado el presidente Mauricio Macri redobló su arremetida contra los sindicatos docentes y demostró que el Gobierno irá a fondo en la pelea contra sus dirigentes: los acusó de radicalizarse, de dar un mal ejemplo a los alumnos, de violar las normas y de hacer un paro nacional que la gente rechaza.
En su primera reacción luego de los violentos incidentes del domingo, Macri aseguró que "los gremios docentes, en vez de dar el ejemplo y cumplir las normas, violan las normas y, como reacción a que las violaron, hacen un día de paro".
"Eso es lo que no queremos más, y lo estamos expresando con claridad. Tenemos gremios docentes que, en vez de reconocer el mal resultado de los informes sobre educación, hacer autocrítica y sentarse en una mesa, radicalizan la defensa de lo que han hecho", fustigó.
Por la noche Macri complementó su mensaje con una frase de agradecimiento a docentes que no hicieron paro y dieron clase.
Mientras Macri hablaba en el CCK, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, recusó a la jueza laboral Dora Temis y apeló ante la Cámara su fallo del jueves último, que ordenaba a la cartera laboral convocar a una paritaria nacional docente en el plazo de cinco días.