Luego del decreto migratorio del Gobierno Argentino para expulsar extranjeros que delinquen y que generó un gran malestar y quejas sobre todo del Gobierno Boliviano, se había concretado en agenda una reunión entre Evo Morales y Mauricio Macri, que iba a ser coincidente el fin de semana que se iba a jugar el superclásico entre Boca Juniors y River Plate el 16 de Abril.
Resulta que la AFA postergó el encuentro para el 14 de Mayo y el Presidente Macri estaría de viaje por China, por lo que Morales se quedaría sin los encuentros, con el Presidente Argentino y el de los dos equipos más importantes de nuestra patria futbolera.
A estas alturas parece inevitable preguntarse porque es necesario y menester que el encuentro entre los dos mandatarios sea coincidente con un partido de fútbol, más si se tiene en cuenta que en la agenda también estaba incluido el temario de venta de gas boliviano, y la situación de Venezuela.
El jefe de Estado Boliviano había manifestado su deseo de reunise con Macri y también entusiasmado por la invitación a presenciar juntos el clásico de fútbol Boca Juniors y River Plate.
El encuentro entre Morales y Macri había sido tramitado por el embajador de Argentina en Bolivia, Normando Álvarez, quien dijo que los presidentes se reunirán en el primer semestre de este año.
