Por lo menos, el director de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, Manuel Arzeno se pronunció por FM Capital en contra de esta decisión.
En este sentido, el funcionario provincial consideró que, “hay una confusión de base. Se trata de resolver la seguridad pública con estrategias de seguridad vial”.
Además explicó que, “no se trata de una ley sino de un decreto presidencial que modifica otro decreto. La provincia no está adherida y cada municipio deberá analizar su situación particular”.
En cuanto a la intención de imprimir en los cascos la patente de la moto, el responsable de la seguridad vial de la provincia aseguró que está en contra de esta medida y consideró que sería un protocolo en beneficio para los motochorros.
Y es que, según un análisis realizado por la Agencia de Seguridad Vial, son estas personas quienes cumplen a la perfección con la documentación del motovehículo y las medidas de seguridad.
Por ello es que Arzeno cree que, son los municipios, a través de los trámites para acceder a la licencia de conducir quienes deberían aplicar acciones más rigurosas de capacitación y formación aplicando escuelas de conducir.