El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, defendió este miércoles el regreso de las clases presenciales frente a la amenaza del juez Roberto Gallardo, que convocó a funcionarios porteños a una audiencia para analizar el comienzo del ciclo lectivo.
Si bien no quiso confrontar políticamente con el magistrado, Quirós aseguró que la falta de escolaridad presencial provoca “un daño irreparable” y planteó que no hay motivos para pensar en una suspensión de las clases en virtud de los protocolos de testeos aplicados por la Ciudad de Buenos Aires, que son de una “altísima calidad técnica”.
“La Justicia nos está preguntando sobre la estrategia de testeo y estamos dispuesto a explicarle (al juez) los detalles académicos y sanitarios por los cuales es correcto hacer una estrategia intensiva de testeos”, añadió.
Quirós recordó que la misma estrategia se ha implementado con los trabajadores de la salud, de la seguridad y de los geriátricos y es muy particular dentro de las ciudades del mundo. “Hemos publicado científicamente esa experiencia porque es muy relevante e innovadora”, enfatizó.
“Si la Justicia requiere información para darle tranquilidad a los trabajadores y a los padres de cómo van a ser testeados, y estos sepan quienes en cuanto se enfermen sean identificados y se puedan aislar, desde ya para nosotros es importante hacerlo”, añadió el ministro.
Quirós se refirió a la importancia de cuidar la salud integral de nuestro niños, porque “son el futuro de nuestra Nación”.
“Lo que ha pasado con la pérdida de sociabilización y de presencialidad en la escuela ha sido un daño que para muchos niños ha sido importante, y se recuperará con el tiempo, en algunos quedarán secuelas, pero para muchos otros niños seguramente va a ser irreparable, sobre todo para los más vulnerables”, advirtió.