Nahuel tenía 21 años y era hincha fánatico del Club Átletico Peñarol. Su asesinato tras ser herido en el cuello durante la madrugada del domingo en el parque San Martín produjo mucho dolor y comnoción entre los puesteros, amigos y familiares que lo conocían.
"Era un chico sano y muy trabajador", comentó una de las tías de Nahuel, quien además informó que están velando al jóven en la sede del club ubicado en el barrio Villa Belgrano. Además, la familiar de Nahuel expresó que están pidiendo a la municipalidad la disposición de un colectivo para trasladar a todas las personas que quieren despedir los restos del joven hasta el cementerio.
Nahuel era un chico de su casa, miembro de una familia trabajadora. El puestero salió en defensa de su hermana discapacitada, que había sido golpeada por él o los asesinos.
"Era un chico muy tranquilo que no venía mucho al parque. Sus padres son dos personas muy trabajadoras que nunca tuvieron problemas con nadie", contaron puesteros.
Ayer fue herido en el cuello y murió desangrado antes de llegar al hospital. Era un chico tranquilo y trabajador, así lo describían los otros puesteros.